Inteligencia emocional
En si, ¿qué se entiende por inteligencia emocional? La inteligencia es la capacidad para resolver todo tipo de problema, la inteligencia no solo supone poder resolver problemas matemáticos si no, que también implica el conocimiento de uno mismo además de poder comprender y conocer a otras personas.
En si, ¿qué se entiende por inteligencia emocional? La inteligencia es la capacidad para resolver todo tipo de problema, la inteligencia no solo supone poder resolver problemas matemáticos si no, que también implica el conocimiento de uno mismo además de poder comprender y conocer a otras personas.
Poder decir que alguien posee inteligencia emocional significa que esa persona tiene la capacidad de comprender nuestras emociones, y además poder conducirlas para que mejoren nuestra calidad de vida.
Tener inteligencia emocional requiere de 5 capacidades:
1. Conocer nuestras emociones.
2. Saber manejar nuestras emociones.
3. Saber motivarnos, ser optimista.
4. Tener empatía, es decir reconocer las emociones de los demás.
5. Ser capas de controlar las relaciones que tenemos con los demás
Manejar nuestras emociones
Conocer nuestras emociones supone los siguiente, si nos enfadamos mucho con una persona nosotros debemos ser conciente de ese enfado, el hecho que seamos conciente de aquella situación nos da la capacidad de poder manejar y controlar aquella situación, en cambio si no nos damos cuenta de aquella emoción podemos reaccionar bruscamente frente a la persona que nos ha hecho enfadar.
Tener conciencia de nuestras emociones nos permite aplicar aquella inteligencia en situaciones emocionales.
Saber manejar nuestras emociones no supone eliminarlas, si no poder encontrar un equilibrio entre lo negativo (Rabia) y positivo (Alegría), esto no se trata de no enfadarse nunca, si no que poder enfadarse con las personas adecuadas, en un grado exacto, en el momento que toca, y de una manera justa y correcta, poder conseguir esto es muy difícil y para ello es necesario poseer inteligencia emocional.
Si somos capaces de controlar nuestras emociones, también podremos ser capaces de no bloquear los que realizamos frente a una emoción determinada.
Si logramos este anhelado equilibrio, también permitimos que aparezca en nosotros otras capacidades más racionales.
Podemos ser capaces de controlar nuestras emociones y así poder conseguir emocionarnos nosotros mismos, ser más optimistas. Ser positivo ante algo nos hacer reaccionar con mas flexibilidad, y también podemos encontrar con mayor facilidad soluciones a los problemas, tanto intelectuales como personales.
Ver las cosas de manera positiva o negativa puede llegar a influir mucho en nuestra vida cotidiana , por ejemplo una persona optimista considera que los fracasos se deben al algo lo cual se puede cambiar, lo que lleva que estar persona lo vuelva a intentar y así poder salir triunfante ante una situación determinada, en cambio una persona pesimista se hecha la culpa de sus fracasos , atribuyéndolo a una característica de ello lo cual no se podría modificar, el optimista tiende a tener una respuesta activa y esperanzada en cambio los pesimista reaccionan pensando que no hay nada que se pueda hacer.
Un ejemplo de la importancia del optimismo lo encontramos en Thomas Edison, el inventor de la lámpara eléctrica. Se cuenta que el realizo mas hasta 900 intentos antes de llegar a su descubrimiento. Cuando iba por el 500, uno de sus ayudantes estaba ya cansado y desanimado y empezó a ponerse bastante nervioso, ¿Qué crees que Edison le dijo para tranquilizarle?,
Piensa que hasta el momento no hemos fracasado, sino que hemos aprendido 500 maneras de cómo no debemos hacer nuestro trabajo.
Tener inteligencia emocional requiere de 5 capacidades:
1. Conocer nuestras emociones.
2. Saber manejar nuestras emociones.
3. Saber motivarnos, ser optimista.
4. Tener empatía, es decir reconocer las emociones de los demás.
5. Ser capas de controlar las relaciones que tenemos con los demás
Manejar nuestras emociones
Conocer nuestras emociones supone los siguiente, si nos enfadamos mucho con una persona nosotros debemos ser conciente de ese enfado, el hecho que seamos conciente de aquella situación nos da la capacidad de poder manejar y controlar aquella situación, en cambio si no nos damos cuenta de aquella emoción podemos reaccionar bruscamente frente a la persona que nos ha hecho enfadar.
Tener conciencia de nuestras emociones nos permite aplicar aquella inteligencia en situaciones emocionales.
Saber manejar nuestras emociones no supone eliminarlas, si no poder encontrar un equilibrio entre lo negativo (Rabia) y positivo (Alegría), esto no se trata de no enfadarse nunca, si no que poder enfadarse con las personas adecuadas, en un grado exacto, en el momento que toca, y de una manera justa y correcta, poder conseguir esto es muy difícil y para ello es necesario poseer inteligencia emocional.
Si somos capaces de controlar nuestras emociones, también podremos ser capaces de no bloquear los que realizamos frente a una emoción determinada.
Si logramos este anhelado equilibrio, también permitimos que aparezca en nosotros otras capacidades más racionales.
Podemos ser capaces de controlar nuestras emociones y así poder conseguir emocionarnos nosotros mismos, ser más optimistas. Ser positivo ante algo nos hacer reaccionar con mas flexibilidad, y también podemos encontrar con mayor facilidad soluciones a los problemas, tanto intelectuales como personales.
Ver las cosas de manera positiva o negativa puede llegar a influir mucho en nuestra vida cotidiana , por ejemplo una persona optimista considera que los fracasos se deben al algo lo cual se puede cambiar, lo que lleva que estar persona lo vuelva a intentar y así poder salir triunfante ante una situación determinada, en cambio una persona pesimista se hecha la culpa de sus fracasos , atribuyéndolo a una característica de ello lo cual no se podría modificar, el optimista tiende a tener una respuesta activa y esperanzada en cambio los pesimista reaccionan pensando que no hay nada que se pueda hacer.
Un ejemplo de la importancia del optimismo lo encontramos en Thomas Edison, el inventor de la lámpara eléctrica. Se cuenta que el realizo mas hasta 900 intentos antes de llegar a su descubrimiento. Cuando iba por el 500, uno de sus ayudantes estaba ya cansado y desanimado y empezó a ponerse bastante nervioso, ¿Qué crees que Edison le dijo para tranquilizarle?,
Piensa que hasta el momento no hemos fracasado, sino que hemos aprendido 500 maneras de cómo no debemos hacer nuestro trabajo.
Para más información:
Por Paula Torres.